La Columna de Trajano (en italiano: Colonna Traiana) es un monumento erigido en Roma para celebrar la conquista de Dacia (actual Rumanía) por parte del emperador Trajano, evocando todos los momentos destacados de esa expansión territorial. La celda que hay en su base tenía la función de sepulcro para los restos del emperador. Se trata de la primera columna cóclida erigida en la historia y estaba situada en el Foro de Trajano, en un pequeño patio detrás de la Basílica Ulpia, entre dos (presuntas) bibliotecas, donde una doble logia a ambos lados facilitaba su lectura.
Es posible que se pudiera tener una visión más cercana de la columna subiendo a las terrazas de la cubierta de la nave lateral de la Basílica Ulpia o a las que probablemente cubrían también los pórticos delanteros de las dos bibliotecas. También era posible una lectura «abreviada» sin necesidad de girar alrededor del fuste de la columna para seguir todo el relato, sino apreciando las escenas siguiendo un orden vertical, dado que su superposición en las diferentes vueltas parece seguir una lógica coherente.
Fue una novedad absoluta en el arte antiguo y se convirtió en la obra más vanguardista del relieve histórico romano. En la Columna de Trajano se asistió, por primera vez en el arte romano, a una expresión artística autónoma en cada uno de sus aspectos, aunque culturalmente es una continuación del rico pasado.